Impunidad, cáncer de México

. GUSTAVO SANTOS ZÚÑIGA. ………………………….

Los mexicanos estamos hasta la madre de la hipocresía de gobernantes y políticos, de sus narrativas orientadas a confundir a la ciudadanía mediante la falsedad, la manipulación y el hostigamiento.

La libertad de expresión, dejan ver, con mucha claridad que, la politiquería es lo de hoy para estar en el top mediático y buscar llevar agua a su molino por encima del bienestar social.

Ahora resulta que nadie sabe nada del actuar de los grupos delincuenciales, mientras el país está incendiado y al borde de colombializarnos, como en la peor época de ese país con la intromisión y presencia del cartel de Medellín de Pablo Escobar.

México vive hoy un vínculo personal y profesional indisoluble, amalgamado por la complicidad de un gobierno fallido e infiltrado.

 Son demasiados los factores de índole criminal que están sobre el escenario caliente de la continuidad gubernamental llamada 4T. No solo el factor García Luna.

Hay movimientos que parecen extraños, o cuando menos sugerentes, en el ámbito de las cárceles de Estados Unidos, donde Ovidio Guzmán y su medio hermano Joaquín (hijos ambos del Chapo), entran y salen de sus celdas entre versiones de arreglos con agencias gringas y con perspectivas declarativas que se agregan a lo que Ismael Zambada, el Mayo, llegue a decir hoy en Nueva York.

Felipe Calderón afirmo en su propio Post “La lucha por la seguridad de los mexicanos no es responsabilidad de una sola persona sino de todo un equipo de gobierno cuya responsabilidad es combatir al crimen organizado con toda la fuerza del Estado”.

La decisión de iniciar una guerra contra el crimen organizado debe ser colectiva, no así el actuar de quienes ya tienen vínculos con los carteles y son beneficiados con enormes sumas de dinero sucio.

Celebro la detención de García Luna, de que el jurado lo haya hallado culpable por unanimidad, y que ahora haya sido sentenciado, de hecho, a prisión vitalicia.  Creo que si algo demuestra la terrible equivocación que cometió Calderón al iniciar su guerra es el destino de García Luna y espero, el hecho de pie a transparentar el ejercicio público y acabar con la impunidad en México.