En jaque imparcialidad del TSJCDMX el magistrado Rafael Guerra Álvarez debe de renuncie a la presidencia
- Chronos
- 17 mar
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BLAS A. BUENDÍA. …………………………………
Digan lo que digan, pero el estrujante Caso Regina SEEMANN AUDIFFRED trae en jaque mate la credibilidad e imparcialidad del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, al ejercer una política selectiva para beneficiar a un malandrín que ha sido acusado por su excónyuge del gravoso delito de pederastia, desentendiéndose de forma automática en la manutención de su exmujer y tres hijos mediante la pensión alimenticia y a quienes dejó en el abandono total, debido a la promoción ilegal que desarrolló con su "poderoso tráfico de influencias políticas de ínfimo nivel” sobre el magistrado presidente Rafael Guerra Álvarez.
Si bien el titular del PJCDMX carece de un operador político de medios, cuya responsabilidad no recaiga en terceros que solo generan omisión, confusión y coacción de funcionarios corruptos como actualmente sucede, debería remover a quienes le están haciéndole sombra a su perfil político, el cual ha repercutido en la Cámara de Diputados donde han demandado su renuncia irrevocable.
Regina Seemann Audiffred ha revelado que su ex esposo la ha amenazado de diversas formas, lo que ha incrementado su temor por su seguridad. “Él me ha dicho que, si me atrevo a hablar, me hará pagar muy caro. Me ha dejado claro que, si no desisto de denunciar, las consecuencias para mí y para mis seres queridos serán graves“, comentó la desesperada mujer, a quien el PJCDMX no le ha hecho justicia de forma inmediata.
No obstante de esos antecedentes y en el lenguaje ordinario de la abogacía independiente de la Nación, se utiliza de manera constante la palabra “justicia” como sinónimo de “igualdad”; igualdad de trato y sin preferencias económicas. “Igualdad” se toma entonces en el sentido de equidad.
Justicia es la equidad referida a la conducta y ética que deben regir a las togas que procuran e imparten justicia.
Por ello, esas togas independientes estiman a la justicia como una condición del carácter objetivo de los valores morales que deben de poseer fiscales, agentes del ministerio público, jueces, magistrados y hasta ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Lo expuesto es digno de ser deseado por todos los que forman parte del entorno de justicia.
Esto es, en consideración constitucional de la Academia de Derecho Penal del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, la razón del paralelo que cotidianamente debe establecerse entre “verdad” y “justicia”.
En el dominio de las leyes y de la razón, una causa es verdadera cuando es conforme a la realidad jurídica; constitucionalmente esa es una garantía de adecuación en la que la abogacía fundamenta en razones válidas sus pretensiones y por ello aquellas togas que dicen procurar e impartir justicia no pueden ni deben aducir verborrea jurídica inadecuada e inmoral para controvertirlas.
Para conocimiento de ciertas togas de corrupción e ignorancia en la interpretación de la ley, las valoraciones deben de ser justas cuando se conforman a la realidad jurídica; esa es la garantía que le otorga el Pacto Federal a los litigantes, a los mexicanos, en la que se hace valer la igualdad al justipreciable, a la víctima, al desvalido, al carente de peculio.
Lamentablemente esos términos se olvidan aplicar en controversias donde la contraparte posee un poder económico y/o político (llámese Guillermo Sesma Suárez ex marido de Regina SEEMANN AUDIFFRED) y esos ignorantes que procuran e imparten justicia prefieren corromper el valor de la moral y de la ley, inclinando la balanza a favor de la corrupción.
Para togas de indignidad del segundo piso de la Cuar…
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