DOCTORES O ESCLAVOS
- Chronos
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ELIZABETH TAPIA SILVA. ……………..
Bajo las tinieblas de la noche, almas en pena deambulan por los hospitales, los objetos se mueven solos o cambian de lugar de un momento a otro; las puertas se abren y cierran solas; hay muchos sonidos extraños; apariciones de fantasmas y siluetas luminosas.
Personas que tienen que quedarse con sus familiares internadas, enfermeras, o enfermeros; los médicos de ambos sexos; y una que otra persona que camina por los pasillos de los nosocomios, quedan atónitos al escuchan ruidos extraños al interior de los elevadores.
En las vísperas del dos de noviembre, Día de los Murtos, esta creencia toma mayor fuerza, a menudo evocan terror, conmoción, repulsión y algunas hasta temor asentando las historias de terror dentro de algunos hospitales de México.
La creencia en los fantasmas es ancestral y se encuentra en numerosas culturas a lo largo de la historia. En la antigua Grecia, por ejemplo, se desarrollaron tres teorías para explicar por qué los difuntos se manifestaban.
Se creía que los espíritus inquietos podían aparecer si carecían de una sepultura adecuada según sus expectativas, y para facilitar el viaje de los muertos al más allá, se invocaba a figuras mitológicas como Caronte y Hermes.
El purgatorio se convirtió en un concepto importante, y se creía que los difuntos se manifestaban para purgar sus pecados antes de alcanzar el cielo. En esta lógica cristiana, los muertos se consideraban dormidos hasta el juicio final.
Dentro de las historietas de terror está la de un niño muy enfermo dijo antes de morir “mamá”, ya que su madre no se encontraba presente.
Algunos trabajadores del hospital aseguran haberse encontrado en los pasillos del hospital con un niño que pregunta constantemente por su madre, a la espera de que un alma bondadosa se apiade de él y lo lleve con ella.
Otra de las narrativas es que en los hospitales de México, cuando la noche cae, los elevadores parecen tener vida propia. Se abren solos, se detienen en pisos vacíos y los pasillos se llenan de sombras. Muchos creen que son fantasmas
Cuenta la leyenda que el Hospital del ISSSTE “Dr. Baudelio Villanueva Martínez” hace unas décadas estuvo repleto de cadáveres, esto debido a que anteriormente los terrenos eran utilizados como Panteón Municipal, que hoy ocupa el nosocomio, pero en 1944 fueron trasladados los cuerpos a lo que ahora es el Panteón Guadalupano.
Es por eso que el hospital encierra historias escalofriantes de almas viejas, que vagan por los pasillos de luz tenue, para lamentar sus penas.
El ISSSTE fue inaugurado hasta el 9 de octubre de 1970, es decir, hace apenas 46 años; cuentan algunas voces que las almas en pena tienen mayor presencia en este, el mes de aniversario, pero sobre todo el mes de brujas.
Existen aclaraciones de los propios doctores y enfermeras, y aseguran que son cuerpos exhaustos. Invisibles. Son médicas, residentes y enfermeras que, sin dormir, sin comer, sin siquiera poder ir al baño, sostienen hospitales enteros mientras el país duerme.
En cuanto al 2 de noviembre, fue instruido en el año 998, por San Odilón, abad del monasterio de Cluny, dedicada a quienes “reposan en Cristo” pero no alcanzaron la vida beática, o el cielo, y están en el Purgatorio.
Los fantasmas son las personas que el sistema vuelve invisibles: Lo que se presenta como vocación y heroísmo es, en realidad, violencia institucional normalizada. Los seres humanos somos diurnos por naturaleza. El cuerpo está diseñado para la luz
Las que cargan turnos antinaturales. Las que trabajan con salarios bajos y sin espacios dignos para descansar.
Cuenta la leyenda que el Hospital del ISSSTE “Dr. Baudelio Villanueva Martínez” hace unas décadas estuvo repleto de cadáveres, esto debido a que anteriormente los terrenos eran utilizados como Panteón Municipal, que hoy ocupa el nosocomio, pero en 1944 fueron trasladados los cuerpos a lo que ahora es el Panteón Guadalupano.
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